¿En qué momento le llega a un deportista la hora de la retirada? ¿Cuándo se encuentra en lo más alto y solo puede caer? ¿O cuándo ya ha caído y le resulta imposible levantarse? Sin lugar a dudas, uno de los momentos más complicados en la vida de un deportista es saber cuando su carrera ha llegado a su fin. Desde niños les han enseñado a luchar, a superar obstáculos, a esforzarse cada día más, a luchar contra las adversidades… y de repente se topan con un punto en su vida donde el esfuerzo, la superación y el trabajo duro ya no valen absolutamente para nada. No existe una respuesta correcta, algunos deportistas deciden retirarse antes de que el deporte les retire y otros después. Hay todo tipo de ejemplos de deportistas que se fueron cuando sentían que no podían ganar más y otros que han seguido todo lo que han podido, alargando sus vidas deportivas hasta la agonía. Y esta introducción acaba con una sola palabra: Nadal.
En la tercera jornada de competición se disputaba lo que podría ser uno de los platos grandes de los juegos: Nadal contra Djokovic. El enfrentamiento venía muy pronto, en segunda ronda, y con demasiadas dudas sobre el físico del tenista español. Nadal este año está intentando volver a ser el que era en sus mejores tiempos pero se está quedando a medio camino. El físico y sobre todo la gran cantidad de lesiones que ha padecido en su carrera deportiva le impiden llegar a conseguir ese estado de fuerza sobrehumano que le llevaba a ganar a cualquier rival aunque fuera mejor que él. De eso ya ha pasado tiempo y en el partido de hoy no se esperaba ningún cambio revolucionario. El primer set fue un paseo para Djokovic, 6-1 sin despeinarse demasiado. El segundo set parecía tomar la misma senda con un 4-0 demoledor. Pero entonces el manacorí tiró de orgullo sacándose de dentro su mejor tenis: 4-1, 4-2, 4-3, 4-4… ¡vamos Rafa! 5-4 para Djokovic y se veía que Nadal no podía más, había llegado el fin del camino. Al serbio no le costó nada cerrar el set y llevarse la victoria. Se acabó… su camino en individuales, que aún le queda el dobles con Alcaraz.
¿Ha llegado el momento de la retirada de Nadal? Eso solo él lo sabe, pero su tiempo de grandeza parece haber pasado. Aún puede tocar metal en la otra competición, pero individualmente parece muy difícil que llegue a ganar más títulos. Por él y porque detrás muchos tenistas vienen apretando fuerte. Nadal se queja de que la gente tiene mucha prisa por retirarle y la verdad es que no tenemos ninguna, pero tampoco nos gusta ver a nuestros ídolos arrastrándose por el barro. Yo siempre tendré en la memoria cuando Induráin mordió el polvo en Hautacam ante Bjarne Riis en lo que iba a ser su sexto tour consecutivo. En ese momento nadie lo sabía pero fue el momento donde Induráin inició su retirada del ciclismo, a pesar de que aún ganaría la medalla de oro olímpica en contrarreloj en Atlanta 96. El 1 de enero del año siguiente anunció su retirada.
Quede lo que nos quede de Nadal, ha sido el tenista español más grande de nuestra historia y posiblemente también el mejor deportista. Decida cuando decida retirarse, nada podrá borrar todos sus logros, ojalá corone este año que parece ser su último, con esa esperada victoria en dobles.
Del resto del día no tengo muchas historias que contar porque ha sido un día bastante flojo, como si hubieran concentrado todo el espectáculo el domingo y el lunes se lo hayan tomado de tranqui. Es como si las televisiones decidieran cuando se juega cada deporte…
La casi medalla del día ha estado en el eslalon de piragüismo, pero esta vez masculino, de la mano de Miquel Travé. En la clasificación hizo un muy buen primer descenso que le clasificó en sexta posición para semifinales, donde hizo un espectacular segundo puesto que auguraba una medalla prácticamente segura. Los comentaristas estaban extremadamente emocionados hablando de oro, pero la verdad es que la distancia con el francés que había marcado el primer tiempo era bastante grande. En la final, la bajada de nuestro deportista fue buenísima, maravillosa, grandiosa… pero por desgracia tocó una puerta lo que supuso una penalización que dio al traste con nuestras opciones de medalla. Sin esa penalización habríamos sido plata… pero las reglas son las reglas y son las mismas para todos. Una autentica lastima porque Miquel estaba haciendo una competición espectacular. Tiene solo 24 años así que le augura un gran futuro.
En cuanto al resto del día, un poco popurrí de todo sin nada especial para contar por aquí. Tengo que reconocer que estoy un poco perdido con las clasificaciones de nuestros deportes por equipo… dejadme que eche un vistazo rápido. En hockey femenino hemos empatado contra Estados Unidos, seguimos con bastantes posibilidades de la siguiente fase. En waterpolo femenino hemos ganado espectacularmente a una de las favoritas, también los Estados Unidos, que nos derrotó en la final de los últimos juegos, así que estamos ya en la siguiente ronda. En balonmano masculino Suecia nos ha pintado la cara, así que así, así, toca seguir luchando. Y creo que eso es más o menos lo que hemos jugado hoy, a ver mañana el baloncesto masculino, que como perdamos estamos prácticamente fuera.
Día tranquilo, casi de transición a la espera de emociones más fuertes. Aún queda mucho y esperemos que todo lo bueno esté al final, porque por ahora nuestros resultados rozan lo discreto.