Clausurando los juegos

La ceremonia de clausura de los juegos de Londres iba a ser un espectáculo de luz, magia, musica y color. Y en la parte de la música lo clavaron, eh, todo musica, el resto… bueno, pues es el resto. La verdad es que los organizadores montaron esto más como un concierto que como una ceremonia de clausura de nada y les ha salido… pues eso, un concierto. Para los atletas allí presentes, todos los que no se habían largado aún a su casa, tuvo que ser una autentica gozada porque hubo buena musica y en buenas cantidades. Para el espectador, bueno, tuvo sus momentos, no vamos a decir que fue algo malo o aburrido, pero las expectativas creadas por la ceremonia de apertura fueron tal altas que cualquier cosa que hagan aquí nos sabe a poco. Ya paso en Pekin que hicieron una apertura más grande que la vida misma y la única manera de superarse era hacer desfilar a miles de vírgenes desnudas a lomos de unicornios. Pero no lo hicieron la clausura fue como… como… uuummm… ¿Te ha gustado? Pues uuummm, ¿vas a comerte esa última anchoa? uuummm. Vamos, que lo prefiero a que me metan astillas dentro de las uñas, pero tampoco creas que lo estoy disfrutando una barbaridad.

Lo peor, o no exactamente lo peor sino lo que dio más miedo fue la presentación de Rio 2016 que fue una cosa a medio camino entre la mística y el absurdo que nadie le quedo claro que narices era, y eso que estaban rodeados de cosas sin sentido por doquier. Además, a mi lo de que aparezca Pele me parece anticlimatico total, en el mundial de fútbol lo que quieran, pero en los juegos. Lo veo y una voz interior dentro de mi dice: lo hace por la pasta… ¡la pasta!

En fin, que este tipo de clausura fue un poco como la de Barcelona 92, que muchos vosotros no habréis visto, pero yo como ya empiezo a tener unos añitos en cada pata pues sí pude ver con mis ojitos a través de la tele. Resumiendo, un poco de folclore local, unos cuantos discursos, tres o cuatro cosas simbólicas y un concierto para que los atletas se lo pasen de lo lindo, antes de pasar su última noche loca en la villa. Sí, estoy reduciendo una barbaridad, pero es que es eso. Resumiendo, que las ceremonias de clausura no me terminan de dar ese punto agradable que me dan las ceremonias de apertura. Además, en Londres el apagado del pebetero fue un poco palla. Salen los Take That y lo apagan… ¿en serio?

Un pequeño resumen de los juegos

Las televisiones siempre hace montajes en plan melodramático para que la gente suelte la lagrimita y piense que bonito ha sido todo mientras se disponen a seguir con sus vidas. A mi esos montajes me sirven para ver si me he perdido algo realmente importante de los juegos y si es así me maldigo eternamente por haber dedicado las suficiente horas al asunto. Este año sin embargo creo que no se me ha escapado nada. Me hubiera gustado ver un poco más de todo, claro, gimnasia lo vi de pasada, esgrima muy poquito, voleibol dos o tres partidos nada más, etc, etc. Pero este año gracias a la cobertura online he podido tragármelo todo, todo y todo. Menos mal que la web tenía un montón de señales emitiendo a la vez para que trastornados  como yo pudiéramos tragarnos horas y más horas de todo. En Pekin fue mucho más complicado, debido a la diferencia horaria, había que revisar mucho material a posteriori y costaba bastante seguir la actualidad de los acontecimientos. Aquí era levantarse y enchufarse en vena, es lo que tiene estar en casi la misma zona horaria. Estoy muy contento en ese aspecto… sí, no me miréis así, es mi vida y la desperdicio como quiero.

En cuanto a los juegos en sí me han parecido unos grandísimos y maravillosos juegos. Tenía muchas reservas al principio porque Londres es una ciudad hiperpoblada y con una red de transporte bastante demencial, pero a la hora de la verdad la gente ha preferido escapar del caos dejando una ciudad casi vacía y sin más problemas de los que habitualmente tiene (trataremos este tema en un futuro post llamado Madrid 2020, ¿es posible?). Así que salvado ese escollo hay que decir que Londres es una ciudad maravillosa que se ha mostrado en todo su esplendor en todas las pruebas disputadas en sus calles. No solo hemos podido ver unas estampas preciosas sino que además hemos podido comprobar el apoyo popular que recibían todas y cada una de las pruebas. Todavía estoy alucinado de comprobar la cantidad de gente que estaba contemplado la prueba de triatlon o la maratón. Me cuesta imaginar esas multitudes en cualquier otro lugar del mundo
En el interior de los pabellones el espectáculo también era una maravilla. En la televisión casi no se ha podido ver porque pasaban directamente al inicio de las pruebas pero las presentaciones de cada competición han sido espectaculares. Musica a todo trapo, luces de neón, focos arrojando luz por todos lados, vamos, que muchas veces parecía más una fiesta rave que una prueba olímpica. Chapeau a la organización todo ese aspecto, se han volcado muchísimo en crear ambientes muy espectaculares y que invitaran tanto a la gente como a los deportistas a la diversión y el entretenimiento. Y de vez en cuando tenían detalles de mala leche, como poner el Under Pressure cuando se tiraba un siete metros en balonmano o poner el Born in the USA cuando estos ganaban una medalla (la letra de la canción no es para sentirse muy orgulloso de ser americano).

En cuanto a la parte deportiva ha habido un poco de todo pero en general todo ha respondido a las expectativas. Ha habido megaestrellas que han rendido a un nivel espectacular, como Michael Phelps o Usain Bolt, ha habido varios records del mundo en bastantes deportes, ha habido mucha emoción, un poquito de drama, grandes partidos, etc, etc. Vamos, lo que se espera de unos juegos olímpicos. Pero si quereis repasar lo que ha sido tenéis todos los post anteriores para ir echando un vistazo a lo que paso, ahora no, dentro de un tiempo, y así recordareis lo grande que fueron estos juegos.

En definitiva, han estado muy bien y yo he sido muy feliz. Ojala vosotros también lo hayáis sido.

¿Queda mucho de rollo olímpico en el blog? Pues quería escribir tres post mas: Españoles, ¿bien o mal?; Madrid 2020, ¿es posible? y tópicos sombre los juegos, este último con preguntas tan trascendentales como, ¿por qué pasamos de los juegos hasta dentro de cuatro años? Es decir, tres ladrillos más y luego volveremos a la rutina habitual del blog… la nada… no, hombre, algo escribiremos, seguro. Ah, y ya volvere a UTCON, tranquilos… ¡volvere!

2 comentarios en “Clausurando los juegos

  1. Muchísimas gracias por la cobertura de los JJOO. Me he divertido mucho.

    Ya me pasaré después a comentar la clausura, los juegos en sí, y el demencial y dadaista desfile brasileiro, con el mayor vividor del cuento por detrás de la monarquía española, Pelé. Ese hombre repelente

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