C’est fini

Se acabaron los juegos de París. ¿Los mejores de la historia? Quien sabe, eso lo tiene que juzgar cada cual. En España nos gusta mucho hacer esa pregunta desde los juegos de Barcelona para reivindicar que los nuestro fueron insuperables. Realmente no hay juegos peores ni mejores, cada uno es especial a su manera. Además, el formato está ya totalmente conseguido por lo que es imposible que por malos que sean no terminen gustándote. Hay tantos deportes diferentes a la vez que siempre terminas encontrando algo que te gusta. Locura a todas horas y en todos los canales. Así que como post final de estos juegos vamos con el resumen final del evento y alguna que otra reflexión.

Ceremonia de clausura. Está claro que pusieron todos los huevos de la cesta en la apertura y aún así les salió de aquella manera. Al menos aquella contaba con la espectacularidad de la arquitectura singular de París, la de clausura contaba con… no tengo ni idea la verdad, porque me he quedado como estaba. Comenzó muy bien en los Jardines de las Tejas, donde apagaron el pebetero y se llevaron una llamita en una pequeña linterna y a partir de ahí, cuesta abajo y sin frenos. Una cosa aburrida, pretenciosa, sin sentido… tenía pinta de ser el típico trámite que estás obligado a hacer pero que te quieres quitar de encima lo antes posible. Sin duda una de las ceremonias menos emotivas de la historia. No hubo ningún momento especialmente significativo que te hiciera echar la vista atrás, fue aburrida, aburrida y más aburrida aún. El único momento interesante de la noche llegó cuando de repente apareció Tom Cruise, se descolgó del techo del estadio, robó la bandera olímpica, huyó en moto, se montó en un avión y se la llevó a los Ángeles. Vaya, ¡era posible hacer algo entretenido!
¿Sabéis esas ceremonias que te dejan con la lágrima floja y te hacen añorar todo lo vivido durante las últimas dos semanas? Pues esta no fue una de esas. Creo que RTVE pensó exactamente lo mismo ya que tardó medio segundo en cortar la señal cuando terminó la ceremonia,  incluso puede que se dejara algo fuera. En fin, pasemos página.

Los juegos en general. Como ya he dicho más arriba, el formato es un cañón y poco más hay que hacer para que resulte atractivo. Van poniendo y quitando deportes a ver si aciertan con alguno pero es muy raro que los nuevos sobrevivan mucho tiempo. Aquí la única novedad fue el Break Dance y fue un poco desastre porque fue el coladero por donde se metió alguna persona que no tenía ni idea de qué iba aquello. No van a repetir la experiencia en los siguientes juegos y no me extraña en absoluto, en mi opinión los bailes no tienen cabida en este evento. Los otros deportes que parecían nuevos, el baloncesto 3×3, el skateboard y el surf realmente no lo eran, ya que estuvieron en Tokio, pero no les hicimos demasiado caso. A mi tampoco me apasionan la verdad, aunque los nuevos que van a meter en los Ángeles, mucho ojo con ellos: baseball/softball, cricket, fútbol bandera, lacrosse y squash. Os dejó que busquéis los que no conocéis en vuestro buscador favorito para que os podáis sorprender vosotros mismos.

Pero volviendo a estos juegos, la verdad es que ha habido muchos momentos donde se ha dado más importancia a la ciudad que a los deportistas. Los escenarios donde se desarrollaban las pruebas eran espectaculares: el Sena, la Torre Eiffel, el Grand Palais, Roland Garros, los Inválidos, Trocadero, Versalles, etc, etc. Cada emplazamiento contaba con unos planos de cámara espectaculares que prácticamente devoraban lo que estaba sucediendo en su interior. Claro que ha habido estrellas en estos juegos: Simone Biles, Leon Marchand, Katie Ledecky, Armand Duplantis, Quan Hongchan, Lebron James, etc. Pero se ha dado tanta importancia al decorado que muchas veces se comía absolutamente todo. No es algo necesariamente malo porque el deporte siempre ha estado en primer lugar, pero en muchos momentos te hacía olvidar que es lo que estabas viendo para dejarte boquiabierto con todo lo que había de fondo.
Aunque pueda parecer lo contrario, ninguna queja a ese respecto. Todo ha sido muy bonito, las competiciones han sido formidables y el escenario elegido ha sido una pasada. Todo muy bien, muy parisino pero muy bien.

En cuanto al rendimiento de la delegación española, repasemos una vez más el número de medallas y diplomas: 5 oros, 4 platas, 9 bronces, para un total de 18 medallas. Una más que en los anteriores juegos de Tokio y Río. En número de diplomas hemos obtenido 51 por 42 en los anteriores. En líneas generales los resultados son prácticamente los mismos de unos juegos a otros, ni mejoramos ni empeoramos, los números son más o menos lo mismo. Esto lo único que quiere decir es que el desarrollo del deporte olímpico en España lleva bastante años estancado. En Barcelona se dió el salto de calidad con la creación del programa ADO en 1987 y desde entonces se ha mantenido el mismo modelo, basado en premiar a los triunfadores y dejar de lado a los perdedores. Así que estamos en las mismas de todos los juegos y en los siguientes los resultados serán más o menos los mismos, porque el modelo se va a seguir manteniendo.
En los medios ha habido mucha palabrería en tonos muy elevados repitiendo muchas veces decepción y fracaso porque el presidente del COE vendió la moto de que se iban a superar las medallas de Barcelona y todos los medios fueron detrás como fanboys descerebrados. Toda esta euforia viene provocada porque veníamos de tener unas actuaciones espectaculares en mundiales y europeos, pero a la hora de la verdad la hora de demostrar nuestra valía en los juegos, la misma historia de siempre. Y esto no es culpa de los atletas en absoluto, al contrario. Todos los que han participado en los juegos han dado lo mejor de sí y se han dejado la piel en la pista. La actuación de los nuestros ha sido sobresaliente, tanto los que han triunfado como los que no han conseguido sus objetivos. Para ellos un 10. Para nuestro ecosistema de deportes un aprobado justito, porque entre comités, federaciones, gobierno y todo tipo de entes burocráticos, no avanzamos en absoluto.

Punto y final. Me lo he pasado muy bien con los juegos y espero que vosotros también hayáis disfrutado de ellos. El tener tanta tecnología y señales televisivas al alcance de la mano ha resultado bastante estresante ya que había momentos en que había hasta 4 españoles compitiendo a la vez y entre la televisión, el portátil, la tablet y el móvil, ¡locura absoluta! Pero una vez cada cuatro años merece mucho la pena. Los juegos son el mayor evento televisivo de nuestros tiempos y hay que disfrutarlos mientras el cuerpo aguante. Gracias a todos por leerme y gracias al Barón que se inventó todo esto. Y luego decían que la aristocracia no valía para nada.

Fin de fiesta

Últimas jornadas de competición y aunque España aún tenía que disputar dos finales y un partido por el bronce, la sensación de fin de fiesta era abrumadora. La decepción por no haber superado las medallas de Barcelona era evidente por parte de todos los medios que han seguido a nuestra delegación y en vez de narrar los eventos del día se dedicaron a hacer todo tipo de análisis y a buscar culpables entre organismos, federaciones y atletas. Ese análisis vamos a dejarlo para cuando terminen realmente los juegos, porque ahora toca narrar las últimas competiciones del día porque aunque fueron pocas.

Quedaban aún pruebas de piragüismo por disputar y aunque se esperaba bastante más por desgracia no terminó cayendo ninguna medalla, quedándose a las puertas con un cuarto puesto. Me ha parecido tan numerosa la cantidad de pruebas que se han disputado en estos juegos que por curiosidad he mirado cuantos deportistas teníamos y si no me han salido mal las cuentas son 25 más 5 del piragüismo slalom. Si quitamos las pruebas de equipos es el segundo deporte donde más representantes hemos enviado, no me extraña tener la sensación de estar viendo españoles constantemente en todas estas pruebas. Lo dicho, se esperaba un poco más y aunque no es mal botín el conseguido, 3 medallas, queda esa sensación de que se podría haber logrado bastante más.

Primera final del día, waterpolo femenino contra Australia. Favoritas indiscutibles por haber realizado un gran torneo hasta el momento y por un estado de forma magnífico. Este equipo sí que llegaba totalmente a tope a los días decisivos de los juegos. El partido estuvo todo el rato bastante igualado, como corresponde a una final. El primer cuarto terminó en empate y en el segundo se impusieron las defensas, logrando únicamente un gol la selección española, una ventaja mínima pero muy importante para el resto del partido. Esa diferencia le sirvió a España para llevar el resto del partido con mano firme y tener a raya a su rival. Se jugaba con cabeza, se realizaban buenas jugadas y poco a poco las nuestras se distanciaron en el marcador. Se mantuvo la distancia al final, dando la cara en todo momento, controlando el partido y con una gran superioridad. Resultado final 11-9 a favor de España y una medalla de oro gloriosa que se llevaba varios juegos persiguiendo. Esto ha sido el trabajo de muchísimos años y de un trabajo fenomenal por parte del equipo. Enhorabuena por esta victoria tan merecida y tan esperada.

El resto del día transcurrió para los nuestros de una manera más reposada, ciclismo en pista, un octavo puesto, natación artística, un séptimo, lanzamiento de jabalina, un sexto, 5000 metros, puesto quince… Y la final de los 1500 femeninos, donde Agueda Marqués volvió a dar la cara como nadie. Nada más empezar la prueba, las líderes se lanzaron a correr a ritmo de récord del mundo y Agueda decidió quedarse atrás porque aquel ritmo no era lo suyo. Estuvo siempre ocupando las últimas posiciones hasta finalmente tras un pequeño acelerón quedar en la penúltima posición. ¿Decepción? Para nada, había vuelto a batir una vez más su marca personal. No todo es siempre ganar medalla sino dejarlo todo en la pista y nuestra corredora lo ha logrado con creces. ¡Grandísima!

Por la noche hubo dos grandes eventos. El primero era la final del baloncesto masculino entre USA y Francia. El partido estuvo menos disputado que la semifinal, con los USA siempre por delante, pero que espectáculo. Sin duda han sido los partidos más divertidos de seguir, jugando para ganar pero siempre disfrutando y haciendo que los espectadores se lo pasarán bien. El final del partido fue espectacular ya que los franceses estuvieron a punto de acercarse en el marcador y justo ese momento surgió la superestrella del equipo, que mira que tienen estrellas, Stephen Curry para cascarse cuatro triples consecutivos cada uno mejor que el anterior. En fin, que gozada de selección y que maravilla poderlos haber visto.

El otro punto culminante del día era la final de boxeo de más de 92 kilos donde nuestro representante Ayoub Ghadfa se enfrentaba a un gigante uzbeko que parecía salido directamente de Juego de Tronos y que tiene un récord profesional de 14-0. Me gustaría decir que no fue una paliza, pero lo fue sin discusión alguna ya que el gigante se movía demasiado bien, no dejaba acercarse y arreaba unos puñetazos de órdago. Vamos, imposible hacer nada. Plata bien merecida para nuestro representante que ha hecho unos combates extraordinarios hasta llegar a este, que era directamente fuera de categoría.

En la mañana del domingo, último día de los juegos, nos jugábamos el bronce en balonmano masculino ante Eslovenia. Esa medalla era importantísima para superar los últimos juegos, así que aunque fuera a una hora un poco canalla, las 9 de la mañana de un domingo, había que estar a muerte con ella. El partido fue el típico de balonmano que te pone hasta los nervios porque cada jugada parece el fin del mundo. El encuentro estuvo empatado en todo momento, llegando al minuto 55 con 21 iguales en el marcador. En el minuto 58 aventajaban por uno a nuestros rivales y los jugadores españoles se dejaron todo en la cancha para hacer válida esa ventaja. Tras un final de infarto, con tiro final de los eslovenos y paradón, la última medalla subió al palmarés español. 18 medallas como 18 soles, 5 oros, 4 platas y 9 bronces. Y 51 diplomas olímpicos,

Y se acabó. Aunque aún se jugó alguna competición, como el quinto puesto del waterpolo masculino, que perdimos quedando finalmente sextos y la extraña prueba del pentatlón moderno, con una posición bastante discreta. En los próximos juegos van a eliminar la parte de la hípica, menos mal.

Pues esto se ha acabado. En el siguiente post, un resumen y una reflexión de cómo han sido estos juegos.

Siempre es más oscuro antes del alba

¿Conocéis alguna de esas historias donde el héroe es un poco bobalicón pero tiene muy buen corazón? Esas donde aspira a tener una vida completamente diferente pero llena de aventuras. Seguro que sí ya que las hay a montones. Como también sabréis que tras iniciar el típico viaje iniciático le van a caer hostias como panes que le van a enseñar lo que es de verdad la vida y sobre todo verdadero significado a su viaje. Son las que le harán descubrir al final de la aventura que en realidad el One Piece son los amigos que ha hecho por el camino. Pues el héroe en esta historia es nuestro equipo olímpico español al que le van a caer en esta jornada golpe tras golpe hasta que va a conseguir llegar al final al ansiado oro. Acompañadme en este camino lleno de sinsabores y penalidades que ya veréis como al final el viaje ha merecido la pena.

Nuestra primera parada va a ser muy breve: taekwondo. Esta vez ha sido rápido e indoloro, Cecilia Castro caía en el primer combate contra una egipcia y sanseacabó. Ya está, no han sido los juegos de los taekwondistas españoles y no hay muchas más vueltas que darles. Eso sí, tengo que retractarme de mis palabras del anterior post. El taekwondo con las reglas actuales no es tan aburrido como parecía. Estuve un rato viendo combates de otros países y menuda diferencia con los nuestros, se repartieron patadas por todos lados. Así que no es que el deporte sea malo, es que los nuestros no han dado la talla. En fin, se cierra este capítulo hasta dentro de cuatro años.

En escalada teníamos una apuesta segura de medalla en Alberto Gines que había sido oro en los juegos anteriores. Pero mira, el día se estaba empezando a cruzar de mala manera, Alberto venía lesionado y para colmo de males en la primera parte de la prueba hizo muy pocos puntos, tan pocos que pasó a la segunda parte en última posición. Remontar de ahí era prácticamente imposible y aunque en la cuerda hizo la tercera mejor puntuación, las medallas se quedaban muy lejos. Un decepcionante séptimo puesto final y la esperanza de que en los próximos juegos vuelvan a dividir las pruebas para que nuestro campeón pueda brillar en la parte que mejor se le da.

Las cosas iban mal, pero a cada prueba del día se iban a poner peor. En piragüismo desastre tras desastre, derrota tras derrota. Ni siquiera tengo claro cuantas pruebas disputaron los españoles en las aguas, porque salían uno detrás de otro continuamente y todos iban cayendo miserablemente. En una de las finales de consolación incluso dos de las nuestras volcaron su kayak dando lugar a una imagen insólita. Cuando tienes el día atravesado y nada te sale es absolutamente desesperante.

Fútbol femenino, partido por el bronce y las españolas eran las favoritas ante Alemania. Infame horario de las tres de la tarde con un sol infernal que no hizo más que perjudicar las opciones de España que llegaba con la gasolina demasiado justa. Partido malísimo, absolutamente infame donde las españolas no daban ni una a derechas. En el minuto 63 una salida al bulto de Cata Coll se llevó por delante a una alemana lo que provocó penalti en contra. Lo de Cata durante todo el torneo ha sido un poco desesperante, ha alternado grandes momentos con fallos de novata. 0-1 y a partir de ese momento volcadas en la meta contraria con escaso acierto. Cuando parecía que todo estaba perdido, en el minuto 97, en el descuento, penalti a nuestro favor. La prórroga estaba al alcance. Alexia decidió tirarlo, con una cara de cansancio que no hacía presagiar nada bueno. Su lanzamiento era detenido por la portera alemana y ahí se acabó todo. Nadar para morir en la orilla.


La valoración de este equipo es complicada de realizar. Veníamos de ganarlo todo y era la primera vez que se jugaban unos juegos olímpicos, pero aspirábamos al oro. Ha sido una gran decepción, pero ahora mismo se nota al equipo fundido tanto mental como físicamente. Han sido dos años muy largos y creo que ha llegado la hora de hacer un alto en el camino y replantearse un montón de cosas. Es complicado pero lo mejor ahora es calma y poco a poco volver a la senda del equipo grande que han sido. Nuestra selección ha sido la mejor y volverá a serlo, sin duda.

Casi a la misma hora, se enfrentaba al mismo rival la selección masculina de balonmano. Semifinales y esta vez el favoritismo recaía en los alemanes, aunque daba igual ya que todo estaba torcido, pero todo. Partido muy disputado con empate a 12 al final de la primera parte. En el minuto 55 de la segunda parte, empate a 24. Estaba todo en el aire pero a partir de ese momento se les apagaron las luces y no metieron un gol más. Alemania solo logró convertir uno pero eso fue suficiente. Derrota y a luchar por el bronce el próximo domingo, en lo que se convertirá en la última opción de medalla de nuestra delegación. A ver si ahí tenemos más suerte y sobre todo acierto.

Todo era un desastre, absolutamente todo. A estas alturas lo mejor era dejarlo, irse a la cama y mañana será otro día. Con este optimismo llegamos a la final del fútbol masculino nada más y nada menos contra el anfitrión. La victoria era posible pero entre tanta mal augurio… Francia marcó en el minuto 11, ahora sí que ya era el fin. Pero los españoles sacaron orgullo y sobre todo buen juego ya que cuatro minutos más tardes un Fermín en estado de gracia empataba el partido, y diez minutos después lograba el doblete. Tres minutos después Alex Baena marcaba el tercer gol y prácticamente nos aseguraba la victoria en el partido. Con 3-1 y una España pletórica, comenzaba la segunda parte donde Francia también demostró una voluntad inquebrantable. En el minuto 79 acortaba distancias y cuando el partido estaba a punto de agotarse, cuando ya tocábamos el oro con los dedos… penalti en contra en el minuto 91. 3-3 y a la prórroga… Estaba claro que hoy no podíamos ganar absolutamente nada.
Pero aquí se acaba todo y llega el punto de inflexión donde nuestro héroe molido a golpes, saca fuerzas de flaqueza para asestar el golpe definitivo. En el minuto 10 de la prórroga un pase magistral de Adrian Bernabé habilitaba a Sergio Camello para que picara el balón y entrara dulcemente en la portería. Con Francia totalmente volcada y los nuestros resistiendo como leones, al filo del final del partido, nuestro portero Arnau Tenas lanza un balón en largo a Camello que en una contra ejecutada perfectamente, mata y remata el partido. 5-3 y medalla de oro. Se acabó el vía crucis.


Qué decir de esta selección. Ha ido de menos a más, entrando muy fría en el torneo pero poco a poco mejorando en todos los aspectos, sufriendo un pequeño traspiés en fase de grupos que logramos enderezar en los cruces. Victoria incontestable de la selección española que parece estar tocada por una varita y sobre todo por un gran juego que logra que todos nuestros rivales sucumban antes los nuestros. ¡Viva la selección española de fútbol!


Con esto podía haber finalizado el día y todos tan contentos. Pero resulta que en el estadio olímpico, entre las pruebas del día se disputaba la final del triple salto masculino. Nuestro representante Jordan Diaz era aspirante al oro, pero también lo había sido Ana Peleteiro y pasó lo que pasó. El primer salto de Jordan fue muy largo, 17.86, que le hacía ponerse en primera posición y ya le convertía de pleno en aspirante a la medalla. Su máximo rival, y también cubano de origen, Pedro Pichardo, saltaba 17.84 en su segundo intento lo que le acercaba peligrosamente al español. En cada salto Jordan casi supera su marca pero no lo logra: 17.85, 17.84… Estaba en muy buena forma, pero no lograba superar su primer salto. Pichardo tampoco lo hacía y en una decisión bastante sorprendente, decidió no realizar su quinto intento para descansar y saltar a tope el último. En la última ronda de salto, nadie supera el salto de Jordan por lo que cuando solo quedaban dos atletas más, la medalla estaba asegurada. El que iba en tercera posición, un italiano también nacido en Cuba, amarraba el bronce. Solo quedaba Pichardo. Se lo jugaba todo a una carta. Tras una gran carrera, su último salto fue de 17.81… ¡Medalla de oro para Jordan! Ni siquiera quisó realizar su último intento, ¿para qué? La verdad es que con su primer salto se podía haber ido a dormir, pero ahí estuvo compitiendo para asegurar el oro. ¡Grandioso Jordan!

Recuento de medallas: 4 oros, 3 platas y 8 bronces. Dos aún por determinar, que serán oro o plata. Total 17, con lo que ya hemos llegado a las de Tokio y las de Río. Es posible hacer 1 más pero ya esta hasta aquí hemos llegado. Ya reflexionaremos sobre esto al terminar los juegos.

Así que al final nuestro héroe, tras sufrir golpe tras golpe, ha logrado la victoria final. Ya solo queda el regreso a casa, es decir, la final de waterpolo femenino y la de boxeo. Y ojalá el bronce en balonmano, pero eso hay que currárselo. Ya se empieza a vislumbrar el fin del camino.

Odio eterno al deporte moderno

Estoy empezando a odiar seriamente el taekwondo. No solo por la cantidad de decepciones que nos está causando, que también, sino por la poca emoción que desprende cada combate. Creo que cambiaron alguna regla de unos juegos a otros para que el deporte fuera más entretenido y espectacular pero menudo aburrimiento está suponiendo. Combates ultradefensivos, escasas patadas, los puñetazos al torso se puntúan uno de cada cien, enfrentamientos decididos por sanciones… Para mi ha sido un sufrimiento pasar por cada ronda siguiendo a los nuestros, ganaran o perdieran, aunque más lo segundo que lo primero.

En fin, que hoy le tocaba el turno a Javier Perez que a trancas y barrancas sacó sus dos primeros combates para meterse en semifinales. A partir de ahí todo se empezó a poner muy negro, un uzbeko le ganó claramente la partida y en el duelo por el bronce un brasileño le pusó las cosas muy duras. A falta de un minuto, en el momento decisivo, su rival encadenó dos patadas al pecho y se acabó todo. Otra medalla que se nos escapa a las puertas. Mañana aún nos queda una última opción, pero me está poniendo malísimo este deporte.

Me quiero quitar ya todo lo negativo, así que voy ya con el hockey masculino donde nos jugábamos el bronce contra la India, favoritos indiscutibles en este deporte. Pues hemos perdido, de manera merecida, pero qué malo ha sido el partido. Los 3 goles han venido de jugada parada y no ha habido manera de ver una buena jugada con la bola en juego. Ha sido el antihockey, porque espero que este deporte no sea el horror que nos han demostrado este partido. Espantoso es decir poco, para arrancarse los ojos.

Vámonos a las antípodas con las mejores noticias del día con el piragüismo. Seguirlo se está convirtiendo en un auténtico quebradero de cabeza. Series y más series, nadie parece quedar eliminado nunca, a veces se pasa a una semifinal, otras a la final, de vez en cuando pasan a una final que es de consolación… Tengo la impresión que todos nuestros representantes tienen opción de medalla, pero está claro que no todos pueden ganarlas. Pues bien, hoy han caído dos maravillosos bronce en este deporte. En C2 masculino 500 metros, la pareja formada por Diego Dominguez y Joan Antoni Moreno pasaban cuartos a mitad de prueba y tuvieron que hacer un esfuerzo sobrehumano para superar a sus rivales neutrales independientes por solo 9 centésimas, menos que un suspiro. Encima con bastante suspense porque han tenido que tirar de foto finish para determinar quien ocupaba el tercer lugar.
Y por supuesto, la esperada medalla en el K4 masculino 500 metros, con nuestro all star formado por Marcus Cooper, Rodrigo Germade, Carlos Arévalo y Saul Craviotto. Este último con 6 medallas se convierte en el español más laureado en unos juegos olímpicos. Los cuatro son auténticas máquinas pero Saul está hecho de una pasta muy especial ya que lleva ganando medallas desde Pekín 2008, que se dice pronto. Que barbaridad de deportistas y que bronce con sabor a oro.  

La otra gran noticia del día venía del waterpolo femenino. El rival era Holanda y todo parecía que iba sobre ruedas cuando el primer cuarto terminaba con 1-6 a favor de las españolas. Se llegaba a la mitad del encuentro con 5-10, totalmente encarrilado para la victoria. Pero entonces las holandesas se han puesto serias y en el tercer cuarto han recortado la ventaja hasta llegar al empate, que se ha mantenido hasta el final del partido. Para mi sorpresa no había prórroga y se iba directamente a penaltis. Sin tregua, Holanda marcaba, España marcaba, una tanda perfecta hasta llegar al último lanzamiento. Con 4-4 en el marcador, la portera española detenía el último tiro y a continuación las nuestras no fallaban. ¡A por la final!

A falta de más medallas, me gustaría hablar de las tres mujeres que están compitiendo en atletismo en la prueba de 1500 metros: Esther Guerrero, Agueda Marques y Marta Perez. No solo son tres personas estupendas que se están mostrando super sinceras en las entrevistas sino que además se están partiendo el pecho en cada carrera. Sus tiempos no les dan para estar entre las mejores, pero es imposible echarles nada en cara. Dos cayeron a la repesca y allí dieron la cara terminando terceras para pasar a la semifinal. En ella, contra todo pronóstico, Agueda logró el pase a final en la primera serie, entrando Esther detrás a sólo 4 centésimas quedándose a las puertas. Y en la otra serie que se corrió más rápido Marta no consiguió el pase a la final… ¡pero batió el récord de España! Un récord que tenía una antigüedad de unos 15 años rebajado en casi dos segundos, una auténtica salvajada. Mucho honor para estas tres corredoras que representan el espíritu olímpico mejor que nadie.

El día acababa con un partido de baloncesto masculino espectacular: EEUU – Serbia. Durante tres cuartos los serbios tuvieron totalmente dominadas a los americanos con un Jokic totalmente espectacular. Como se nota que ha sido el MVP de este último año, porque es el único capaz de luchar él solo contra toda la NBA. La diferencia al final del tercer cuarto era de 13 puntos a favor de los serbios. Pero en ese momento los americanos se pusieron serios de verdad y empezaron a jugar como un equipo metiéndolas de todos los colores. Un último cuarto con un resultado de 32-15 fue totalmente demoledor y es que cuando un equipo de tanta calidad como el americano se pone a jugar de verdad es imposible ganarles. La final va a ser contra Francia, y cualquier otro resultado que no sea el oro sería una gran sorpresa.

Medallero Español: 2 oros, 3 platas, 8 bronces, 3 indeterminadas, siendo estas últimas oro o plata. Van 16. A ver sí cae al menos una más para igualar los últimos juegos. 

Un oro, un bronce y unos cuantos sinsabores

Jornada bastante agridulce, con muy buenas noticias y con bastantes resultados decepcionantes. ¿Qué deberíamos ponderar más en una balanza? Ganar un oro y un bronce compensa todos los sinsabores del día, pero ver como caen los nuestros uno tras otro da una rabia tremenda. Repasemos el día que ha empezado de la mejor forma posible.

A las 7:30 de la mañana comenzaba la prueba de Maratón de marcha relevo mixto. Es decir, correr un maratón haciendo marcha con una pareja mixta… vaya, si el propio título de la prueba lo explica todo. Los favoritos indiscutibles eran la pareja española bicampeona del mundo formada por Marta Pérez y Álvaro Martín, que ganaron plata y bronce en sus respectivas pruebas individuales. El primer relevo lo realizó Álvaro, manteniéndose en el grupo de cabeza sin ningún tipo de problemas. En el segundo relevo Marta se mantuvo en el mismo grupo sin problema, se les veía a los dos fuertísimos. En el tercer relevo tras un amago de otros equipos, quedaron solo en cabeza el español y el ecuatoriano que había ganado el oro individual. Parecía más rápido el rival, pero claro, había trampa, no estaba haciendo marcha y le sacaron dos paletas rojas que con una más te plantan 3 minutos de sanción. Y a partir de ese momento, empezó a reducir la marcha, Álvaro le sacó unos pocos segundos y en el relevo Marta remató la faena. La ecuatoriana prefirió guardar la plata a arriesgarse a perderlo todo y los últimos 10 kilómetros fueron un paseo triunfal para la marchadora española. Oro totalmente incontestable y merecidísimo, porque la pareja española junta es demasiado poderosa para unos Juegos Olímpicos. Esta era una de las medallas esperadas pero no por ello se disfruta menos. Grandísimos nuestros marchadores, siempre al quite de salvar los muebles al resto de la delegación de atletismo.

La siguiente competición donde se jugaban los muebles (a estos altura de juegos, ya se juega algo serio siempre) era el balonmano masculino donde en cuartos se enfrentaban a Egipto, que aunque no sea una potencia mundial, es uno de los oponentes más duros que nos podía tocar. Este deporte pone de los nervios a cualquiera y ver este partido es para destrozarlos. El equipo español fue casi todo el partido por detrás del marcador y parecía que la derrota era segura porque estaban jugando muy mal. El partido se decidió en el último minuto donde a falta de 30 segundos lograron el empate que llevó el partido a la prórroga. En ella los mismos nervios y la misma igualdad, hasta que por un milagro nos pitaron un siete metros bastante dudoso y es que al parecer en este deporte los árbitros nos odian a muerte… o les echamos la culpa cuando perdemos, lo que os apetezca. Una parada maravillosa del portero español en el último segundo les dio la victoria y el paso a semifinales, donde toca un hueso durísimo de roer, Alemania.

El taekwondo empezó en la jornada de hoy y… ¡todo mal! Que rabia, de verdad, con las esperanzas que teníamos aqui puestas. Tanto Adriana Cerezo como Adrian Vicente caían en su segundo combate y de manera bastante merecida. La primera no tuvo más oportunidades porque para clasificarse para la repesca su rival tenía que llegar a la final y no sucedió, ¡qué lástima! Adrian tuvo más suerte y sí se clasificó para ella, pero en el combate por el bronce… horroroso, su rival le dió por todos lados. Madre mía, fue terrible, terrible. A ver si en la siguiente jornada sacamos algo, porque hoy ha sido un espanto.

A la hora de comer llegaron los peores sinsabores del día. Tanto en waterpolo masculino como en baloncesto femenino habían acabado en primera posición en sus fases de grupos, por lo que en teoría les tenían que haber tocado rivales muy fáciles en los cruces. Pero resulta que no, Croacia para el waterpolo y Bélgica para el baloncesto, no podíamos tener peor suerte. Y por desgracia pasó lo que tenía que pasar en los dos encuentros. Todo el rato por detrás del marcador, a remolque, impotentes ante la situación y sin poder plantar cara en todo el partido. Los dos partidos jugándose casi a la vez y los dos siendo totalmente decepcionantes. Se me llevaron los demonios viendo las derrotas una detrás de otra.

Y como no hay dos derrotas sin tres en voley playa, cuartos para las parejas masculina y femenina y contra ese muro nos matamos. Ni Pablo Herrera con Adrían Gavira pudieron contra una pareja noruega, ni Daniela Alvarez con Tania Morena pudieron vencer contra las canadienses. En ambos partidos derrotas por 2-0 sin discusión, simplemente sus rivales eran mejores. En fin, aquí simplemente se trataba de llegar lo más lejos posible y sendos diplomas olímpicos no son un mal botín.

Para quitarnos tan mal sabor de boca, la natación artística (que antes se llamaba sincronizada) nos dió una alegría de bronce. Es un poco anticlimático este deporte, porque la medalla de oro estaba decidida prácticamente antes de saltar a la piscina. Las chinas arrasaron en las tres pruebas que componen esta modalidad. Las nuestras el primer día lo hicieron de lujo y se pusieron segundas, pero el segundo día cometieron un error que les hizo perder una posición en el podio. El tercer día lograron volver a su nivel pero era ya imposible remontar la diferencia de puntos, así que medalla de bronce. Es una pasada lo que hacen pero es tan complicado ganar posiciones a sus rivales que resulta muy frustrante. Sea como sea, un gran bronce. Llevaban 12 años sin ganar medalla a pesar de todo el esfuerzo realizado durante todo este tiempo.

La jornada para los nuestros acababa con boxeo, Ayoud Ghadfa contra una mala bestia francesa en la categoría de mayor peso, +92 kilos. Lo que pasa que el español es enorme, una auténtica mole que impone un respeto encima del ring brutal. El combate fue dominado durante todo momento por nuestro representante, muy serio, manteniendo bien la distancia y metiendo golpes claros en la cara de su rival. El combate estaba prácticamente ganado pero en el tercer asalto un susto, el rival acertaba un golpe y tiraba al español que para demostrar que no se había hecho nada se levantó pegando un salto como si fuera un karateka. Al final, victoria por decisión unánime de Ayoud Ghadfa y el sábado luchará por el oro. Y si combate como lo ha hecho hasta ahora se lo tiene que llevar seguro.

Recuento total de medallas. 2 oros, 3 platas, 6 bronces, 2 por determinar. Parece ya claro que superar la cifra de Barcelona va a ser casi imposible, pero bueno, hasta el final hay que intentarlo.

Un día más o menos tranquilo

Pues esta vez sí que ha tocado un día tranquilo. No es lo que me gusta ya que a todos nos va la emoción de ganar o perder medallas a todas horas, pero claro, no todos los días pueden ser fiesta para nuestra delegación. En esta jornada han pasado poquitas cosas, pero bueno, han pasado, vamos a repasarlas.

Daba comienzo lo que en la página oficial de los juegos llaman «Piragüismo sprint«, que es un nombre precioso para esta prueba que consiste en pegar paladas como si no hubiera un mañana. Tengo que decir que el inicio de la jornada ha sido bastante desconcertante porque había pruebas y más pruebas y algunos palistas repetían en distintas modalidades y unos se clasificaban directamente a semifinales y otros a cuartos… En fin, un lío todo. Aquí dicen que van a caer medallas a puñados, pero bueno, con dos o tres nos conformamos, no seamos avariciosos.
A ver si me aclaro. Primero fue el K4 masculino 500 metros, donde está metido Saul Craviotto, que hasta ahora ha ganado 5 medallas en los anteriores juegos y por supuesto en estos aspira como mínimo a otra, Marcus Cooper abanderado olímpico en estos juegos y en cuyo palmarés cuenta con 2 medallas, Rodrigo Germade y Carlos Arevalo, ambos con 1 medalla. Vamos, 9 medallas juntas en la misma embarcación y como no podía ser de otra manera, pase directo a semifinales. Esto es algo así como nuestro all star del piragüismo.


En la misma modalidad femenina, la más conocida es Teresa Portela ganadora de  1 medalla, aunque sus compañeras también tienen metales en distintos mundiales y europeos. Estas también han pasado directas pero a la final A… está pasando como en atletismo, hay pruebas que pasas directo, otras que no, otras que hay repesca, otras que vete tu a saber y no hay otra manera de descubrirlo que sobre la marcha. En fin, que la final A es opción de medalla.
Y me vais a perdonar el resto pero voy a hacer un resumen superrapido porque esto no es una web de resultados. Atentos al cacao: C2 500 metros tanto masculino como femenino clasificados para semifinales, K2 500, una pareja masculina a semifinales y otra masculina y femenina a cuartos… los cuartos se corrieron a continuación donde pasamos a semifinales. Y creo que ya está todo. O sea, mazo de semifinales y una final A. El resumen es, te pones la tele y solo ves la gente dando paladas esperando a que los comentaristas te digan en qué fase de la competición se encuentran.

Madre mía lo que he rellenado con el piragüismo, como se nota que hoy había poco y es que los dos partidos de la mañana se pueden resumir muy rápidamente porque no han tenido mucha historia. En cuartos de final de waterpolo femenino jugábamos contra Canadá. Nada más empezar el partido parpadeé y me perdí dos goles goles de nuestra selección que sin demasiado esfuerzo se impuso a su rival por 18-8. El otro partido que se puede despachar en cuatro líneas fue la semifinal masculina de hockey hierba donde Holanda no concedió una sola oportunidad al conjunto español. 4-0 inapelable y a jugarse la medalla de bronce contra la India.

Una disciplina que no acabo de entender y que me hace sentir bastante viejo: Skateboarding. Había una española en la final y aquí es donde empiezan las pegas de señor mayor. La muchacha tiene solo 15 años, llegaba a la final con un tirón importante en la espalda y la han infiltrado para ver si aguantaba. En definitiva, todo mal. La pobre hizo lo que pudo y quedó séptima y no me quedó claro si podía haber quedado en mejor posición o no. Aparte de eso no entiendo este deporte, se caen una barbaridad en la realización de las pruebas. Será completamente normal pero un deporte en el que el fallo está tan asociado a la competición no me termina de gustar nada.

Y a última hora de la noche, la catástrofe absoluta. España jugaba en fútbol femenino contra Brasil que les tenían muchas ganas desde la fase de grupos, con aquel partido bronco como pocos. Ellas salieron muy enchufadas, las nuestras como que no. En el minuto 6 una cagada de la portera española les ponía el partido cuesta arriba, y a partir de ahí fue todo un desastre. Jugaron fatal sin saber llevar la iniciativa en ningún momento. Brasil llevó el partido a su terreno y la jugada les salió perfecta. Al final de la primera parte cayó el 2-0, así que tocaba remar en la segunda parte. No nos salía nada y cuando más volcadas estaban, el 3-0. Era casi imposible sobre todo porque las jugadoras brasileñas caían lesionadas a la mínima que las tocaran. El 3-1 llegó en el minuto 85 y había una mínima esperanza pero otra cagada enorme de la portera española nos terminó de matar. No había nada más que hacer. 4-2 final y a luchar por el bronce.


Una posible medalla de oro se nos ha quedado en un posible bronce y ya veremos. Esta selección está empezando a dar algunos de los síntomas de los malos tiempos del anterior seleccionador. En fin… Día tranquilo más o menos porque al final se calentó. Por suerte empieza el taekwondo y eso siempre nos da algo… o medallas o diversión, o las dos cosas. Lo que sea con tal de quitarme este mal sabor de boca.

Parecía un día tranquilo

El típico lunes donde absolutamente nadie tiene ganas de hacer nada. Después de un domingo trepidante estaba claro que hoy tenía que ser un día de relax y de tranquilidad donde no pasara nada de nada de nada. La agenda del día no parecía augurar grandes cosas para hoy, alguna lucha por las medallas, alguna promesa de batir un récord, pero poco más. Pues parece ser que para los deportistas no existen los lunes. Ha sido un día tan intenso como el que más.

La mañana comenzaba con triatlón mixto, que la verdad ha sido una prueba un poco extraña, sobre todo en su parte a nado. La organización se ha empeñado que todas las pruebas del triatlón se disputen en el rió Sena y la verdad es que aquello tiene un color marrón demasiado inquietante. Ese agua no está para meterse dentro ni menos para hacer deporte. Incluso la delegación belga ha llegado a enfermar por haber tragado esas aguas que vete tú a saber que pueden llevar dentro. España ha quedado décima y la verdad es que la prueba es muy entretenida de ver, pero contemplar  cómo en cada relevo se tienen que meter en esas aguas fecales da bastante repelús.

La mañana continuaba con el voley playa con dos parejas en liza. La masculina formada por una pareja ya mítica, Pablo Herrera, que consiguió plata en Atenas 2004 y Adrián Gavira, que no tiene medalla pero que ya ha disputado cuatro juegos. Se enfrentaban a unos polacos que son de las mejores del circuito por lo que la derrota era algo que casi se daba por hecho. Pero ni Herrera ni Gavira se han rendido jamás y menuda manera de plantarle cara a sus rivales. Los favoritos parecían los nuestros, porque han sido los que han llevado la iniciativa durante todo el enfrentamiento y han arrasado durante todo el partido. 2-0 y para cuartos y si mantienen este nivel se puede aspirar a todo.


Nuestra otra pareja era la formada por Daniela Alvarez y Tania Moreno, enfrente dos holandesas de muy malas pulgas. Y aquí sí que pintaba la cosa fatal sobre todo cuando nos poníamos con un set en contra y en el segundo set iban 14-18 abajo. A solo tres puntos de la derrota estaba ya todo perdido… excepto que le echaron un par de bemoles y se pusieron a remontar. Las holandesas reclamaron una jugada conflictiva, el árbitro hizo caso omiso y eso las desquicio haciéndoles perder el set. El tercer set fue muy igualado hasta que justo en los puntos decisivos, las nuestras sacaron todo lo que tenían dentro para acabar con sus rivales. ¡Dos equipos en cuartos el mismo día! ¡Espectacular!

El siguiente evento importante del día era la semifinal del baloncesto 3×3 contra Estados Unidos. Ganar al baloncesto a los USA es imposible, así que de aquí estaba claro que no se podía sacar absolutamente nada. Las nuestras fueron a remolque durante todo el partido hasta los últimos minutos donde sacaron su mejor juego para forzar la prórroga. En la misma sucedió lo inesperado, nos salió todo a la perfección y tras provocar una falta personal nos hicimos con los puntos necesarios para clasificarnos a la final. ¡Otra medalla! Ahora un poco más adelante veremos de qué color, que la final se disputaba a última hora de la noche.

En fútbol masculino, semifinales contra Marruecos, la venganza del Mundial. El partido empezó con la tónica habitual en estos juegos, con un gol en contra por culpa de un penalti tonto cometido por nuestros jugadores. Tocaba remontar, como siempre, y lo hicimos. Fermín, que se encuentra en un estado de gracia tremendo igualó la contienda y en el minuto 85, un extraordinario gol de Juanlu Sanchez nos dió la victoria. La verdad es que casi todos los partidos han sido un sufrimiento (excepto Japón), pero ha merecido la pena porque ya estamos en la final. Nuestro rival será Francia y va a ser muy complicado ganarles en casa.

En hockey hierba femenino tocaba cuartos contra Bélgica, el mismo rival al que ayer ganamos en masculino. Por desgracia en esta ocasión las tornas se dieron la vuelta. En un partido áspero, espeso, de masticar ladrillos, aburrido como ninguno, insufrible como nunca, nos endosaron un 2-0 en el último cuarto al que no tuvimos ningún tipo de respuesta. En fin, que hasta aquí hemos llegado, diploma olímpico y poco más. Era muy difícil y no les ha dado para más.

La final del Baloncesto 3×3 era por la noche y contra uno de nuestros peores rivales, Alemania, que ya nos había vencido en fase de grupos… como Estados Unidos. Era una total incógnita lo que podíamos hacer aquí y la verdad es que jugamos un extraordinario partido llevando todo el rato la iniciativa y haciéndonos soñar con el oro durante casi todo el encuentro. A falta de un minuto el resultado era de tablas en el marcador, pero a falta de 30 segundos, un tiro desde la línea de 3 nos dejó totalmente KO. Poco más se jugó y aunque logramos acercarnos en el marcador no sirvió para nada. Derrota por un punto y una plata olímpica que es maravillosa porque nadie contaba con ella. Totalmente inesperada y una gran sorpresa. Aunque muchos aún no entendamos exactamente en qué consiste este deporte, no le vamos hacer ascos a ninguna plata.

Recuento actual de medallas: 1 oro, 3 platas, 5 bronces, 2 por determinar. 11 medallas es una muy buena cifra a estas alturas.

Mientras nuestras campeonas luchaban en la media cancha del baloncesto, en el estadio olímpico se disputaba la competición de pértiga donde Armand Duplantis se llevaba el oro sin despeinarse al ser el único saltador que superaba los 6 metros. De forma inesperada su siguiente altura era de 6,10 metros, que también superó sin dificultad y que suponía récord olímpico. Pero todo el estadio le pedía que intentará el del mundo de 6,25, que era por lo único por lo que la gente seguía allí. Y Duplantis lo intentó. El primer intento fue nulo, golpeó el listón con sus piernas al caer. El segundo no fue mucho mejor ya que se apoyó en el listón con sus manos al superarlo.  Pero el tercero… El tercero fue una maravilla donde saltó limpiamente sin tocar el listón, superando una vez más su propio récord del mundo. Qué manera más maravillosa de poner el broche a la jornada. ¡Nos gustan los lunes…a veces!

Alguna sonrisa y muchas lágrimas

Tocaba levantarse pronto para ser un domingo, a las 9:30 de la mañana. Algunos a esa hora ya se han tomado su ración de churros, otros estamos aún en el tercer sueño. Carolina Marín se jugaba el pase a la final de bádminton frente a una rival china que tenía peor ranking que ella, por lo que nuestra representante era la favorita. El partido iba sobre ruedas, Carolina se sentía mejor que nunca, estaba jugando a una velocidad infernal y su rival no hacía que jadear y sudar por los cuatro costados. El primer set cayó del lado de la española sin ningún tipo de contestación por parte de su rival y el segundo set iba por el mismo camino. El camino hacía la final estaba prácticamente despejado y el estado de forma de Carolina hacía soñar con el oro. Pero cuando iba ganando por 10-6, un salto para alcanzar el volante le hizo sufrir una mala caída que le destrozó la rodilla. Carolina se echó al suelo destrozada porque temía lo peor. Tras unos momentos de incertidumbre y mucha preocupación, se levantó y decidida a no retirarse se puso una rodillera y regresó a la pista para intentar cerrar el partido ya que la victoria suponía al menos la plata. Tras disputar dos puntos y ver que la rodilla no respondía, Carolina se derrumbó. Se acabó París para ella y depende que se haya lesionado exactamente en la rodilla, puede que también su carrera.


Que angustia de escena, que panorama más desolador, que desgracia más grande para una deportista. Todo el pabellón se encontraba totalmente compungido y su rival no hacía más que preocuparse por ella. Pero así es el deporte. En un momento estás a punto de estar en lo más alto y al siguiente sufres el más cruel de los infiernos.
Carolina Marín es y será siempre una grande del deporte español. Ha triunfado en algo que era totalmente desconocido en este país y ha logrado que fuera televisado en las cadenas nacionales y que lo siguiéramos miles de españoles. Ha tenido una carrera excepcional y la deseo la mejor de las suertes tanto si desea seguir como si lo deja. Sea como sea, gracias por todo Carolina.

Después de la peor forma posible de empezar el día, venía el partido por el bronce de Cristina Bucsa y Sarra Sorribes en tenis. Que gran diferencia del anterior partido de semifinales donde se vio a las nuestras muy agarrotadas y sin saber que hacer exactamente para vencer a sus rivales. Hoy era otro mundo, se las veía muy relajadas, con muy buena sintonía entre ambas y con ganas de jugar al tenis. El partido por la medalla no tuvo mucha historia, doble 6-2 en una hora y quince minutos, donde las nuestras se hicieron con un merecido bronce por el que han luchado durante toda la competición. ¡Enhorabuena! Es una pena que hayan tenido menos atención mediática que otros de nuestros deportistas, pero es lo que hay. Además, esta era una de las medallas con las que no se contaba, así que sienta el doble de bien.

La otra cara de la moneda fue Alcaraz. La esperada final con Djokovic no fue todo lo buena que se esperaba, quizá porque es más divertido que estos dos se enfrenten a 5 sets. El partido estuvo tremendamente igualado, tanto que ninguno de los dos cedió un solo break y el partido se decidió en sendos tie-breaks. El partido se decidió en pequeños detalles y podemos decir que Alcaraz estuvo de 9,99, pero el problema es que Djokovic estuvo de 10. En los momentos decisivos fue mucho más certero y eso supuso toda la diferencia. Oro olímpico merecido para coronar la carrera del tenista con más títulos de la historia. Alcaraz se tuvo que conformar con la plata, pero aún le quedan muchos juegos por delante y seguro que tarde o temprano nos terminará dando el oro. Aún así, gran competición, nunca hay que despreciar una plata.

En hockey hierba masculino menuda sorpresa que nos ha dado nuestra selección. Se enfrentaban en cuartos frente a la actual campeona olímpica, Bélgica, y ni eran favoritos ni se esperaba absolutamente nada. España hizo un partido muy serio, muy ordenado, muy a cara de perro y de tú a tú con su rival llegando al descanso con empate a cero. En los dos cuartos restantes nos adelantamos hasta en dos ocasiones para llevarnos el triunfo final por un 3-2 totalmente inesperado que nos ha metido en semifinales, donde esta selección ha demostrado que puede llegar a todo.

En boxeo teníamos a Enmanuel Reyes en el combate de semifinales en el peso de 92 kilos y realmente no he entendido nada de lo que ha pasado. Este es uno de esos deportes que depende de la puntuación de los jueces y pasa que tu estas viendo una cosa clarísima y los jueces están viendo todo lo contrario. Nuestro representante llevó todo el peso del combate, acertó los golpes más claros y parecía el claro ganador… pero en ningún momento los jueces pensaron de esa manera. Derrota clara (según los jueces) y medalla de bronce. Que a ver, no es mala, pero se merecía haber pasado a la final. En fin.

En voley playa, Liliana Fernandez y Paula Soria jugaban octavos contra unas peligrosas suizas. Estuvieron a punto de llevarse el primer set, estuvo muy igualado hasta el final ,pero cayó del lado suizo y en el segundo set no hubo mayor historia. Se peleó pero no se pudo. Y es una gran pena porque este era el último partido olímpico de Liliana, una deportista que aunque no nos ha dado ninguna medalla, nos ha dado unas muy buenas tardes de voley con su compañera Elsa Baquerizo. Muchas gracias por todo, nos ha hecho disfrutar mucho.

Y hoy no tengo muchas ganas de comentar nada más por el mal cuerpo que me ha dejado lo de Carolina. Recuento de medallas: 1 oro, 2 platas, 5 bronces y 1 desconocida por disputar. Seguimos.

Calma antes de la tempestad

Después de tantos días de emociones y medallas, tocan momentos más tranquilos y sosegados. El deporte a todas horas no para, pero las emociones han sido menores que en otros días. Así que hagamos el repaso de un día que en resumidas cuentas ha sido un poco flojo.

La mañana empezaba muy temprano en judo con un formato de competición que en principio se me antoja un poco extraño pero que cada vez se ve más: mixto por equipos. Aunque bien pensado sería lo más justo para muchos deportes. La primera ronda era contra el equipo de refugiados olímpicos, que dicho así da un poco de mal rollo porque es un poco, ¿de verdad quieres derrotar a unos pobres refugiados? Pues un 4-0 sin muchas complicaciones y a la siguiente ronda contra el coco del torneo, Japón, que a lo mejor de judo saben un poco. Ha sido totalmente inesperado que hayamos dado la cara y que hayamos llegado al 3-3 para forzar el último desempate. Por desgracia el último enfrentamiento se ha decantado a su favor. Una lastima por nuestro judo, que ha dejado el pabellón muy alto en estos Juegos. Por cierto, la final ha sido una pasada entre Francia y Japón, aunque el sorteo final que ha decidido quién se enfrentaba en el combate decisivo ha sido un poco sospechoso al favorecer demasiado a los franceses que han terminado llevándose el gato al agua. Al final el formato esta bastante entretenido, la verdad.

Continuamos con bádminton donde Carolina Marín se enfrentaba en cuartos a una japonesa que tenía el miedo en la cara antes del partido, durante y después. Carolina ha entrado ya en modo destroyer y no sintió absolutamente ninguna pena de su rival a la que destrozó sin mayores miramientos por dos sets a cero. Así que a semifinales a luchar por las medallas con la mirada del tigre totalmente activada. La verdad es que me parece super complicado viendo como juegan las asiáticas este deporte, pero luego ves a Carolina que las disputa los partidos de tú a tú y se te pasa todo.

Me acabo de dar cuenta que la mañana ha sido completamente japonesa, porque en waterpolo masculino también nos enfrentábamos a ellos. Pero claro, serán muy buenos en judo, decentes en bádminton… pero en waterpolo no, en waterpolo no pueden ser nada. 23-8 para los nuestros en un partido con cero historia donde a la media parte ya íbamos ganando 10-2. Así que primeros de grupo y clasificados para cuartos donde en teoría nos tiene que esperar un cruce asequible.

Dejamos tierras orientales para mencionar que en voley playa Daniela Alvarez y Tania Moreno se jugaban el pase a la siguiente ronda ante unas alemanas a las que en un partido muy reñido les hemos arrebatado la victoria. De esta manera, hemos metido a todos los equipos de voley playa que hemos llevado en la siguiente ronda, octavos. A ver que cazamos aquí porque como el badminton me parece algo muy complicado que depende mucho del día que tengas.

En hockey hierba femenino, la derrota ante Australia nos mete en problemas ya que el cruce de cuartos es ante Bélgica, mismo rival que nos ha tocado en el masculino. Y en ambos casos son muy buenos por lo que en ninguno de los dos enfrentamientos somos favoritos. Pero esto hay que ganárselo en la pista, así que a muerte, pero bastante chungo la verdad.

En baloncesto femenino cómoda victoria ante Serbia, por fin un partido relajado. Con 3 victorias y primeras de nuestro grupo se supone que nos tiene que esperar un cruce cómodo, pero todavía hay que esperar al resto de grupos, porque han hecho una especie de ranking combinado para determinar en qué orden van los cruces que tela… Cada competición tiene un sistema de clasificación más marciano.
En la otra modalidad del baloncesto 3×3, derrota ante Alemania, pero por una extraña combinación de resultados pasamos segundas de grupo lo que nos mete directamente en semifinales en plena lucha por las medallas. Como todavía tienen que disputarse los cuartos, habrá que esperar a ver quién nos puede tocar, porque si nos toca Estados Unidos, mal asunto

En el concurso individual de gimnasia teníamos una opción de medalla con Ray Zapata, que ya nos dio una de plata en los anteriores juegos. Para mi su prueba fue impecable, pero se me escapan los matices de la gimnasia masculina ya que su concurso solo sirvió para darle el séptimo puesto. El propio gimnasta ha reconocido que su actuación no fue lo bastante buena.
En este concurso, también se disputó el salto femenino en donde Simone Biles arrasó con dos saltos espectaculares. Que sensación más extraña esa de hacer tus saltos y ni tener que esperar al resto porque sabes que las rivales ni se acercan al nivel de tus saltos.

Las mayores emociones del día las dio el fútbol femenino, donde siendo favoritas para el oro, íbamos perdiendo 0-2 contra Colombia a los 10 minutos de la segunda parte. A partir de ese momento hubo que ponerse serias y a trabajar a destajo hasta el final del partido. Un gol de Jenni Hermoso nos daba esperanzas y mientras nuestras rivales usaban todos los trucos sucios posibles para perder tiempo, un gol de Irene Paredes en el minuto 97 nos metía en la prórroga. Los 30 minutos adicionales fueron intrascendentes, o más bien no hubo goles aunque estuvimos atacando todo el rato. En la tanda de penalti con muy poca tensión, las colombianas fallaron el primer lanzamiento y nosotras embocamos todo lo que tiramos. 4-2 resultado de la tanda y a semifinales donde nos espera una Brasil con la que ya tuvimos muchos problemas en la fase de grupos. Va a ser un partido durísimo, pero claro, una medalla se lo merece.

Las últimas emociones del día las esperábamos de Ana Peleitero en la final de triple salto, clara opción de medalla. Por desgracia fue una final bastante extraña, Ana empezó haciendo saltos bastante cortos y a la mitad de la competición se puso a llover, dejando la calle de batida bastante resbaladiza. Algunas de sus rivales pudieron superar sus marcas pero Ana no logró hacerlo, terminando con una decepcionante sexta posición. Ella misma reconoció que no había tenido buenas sensaciones, que la lluvia tampoco le vino bien, etc. En definitiva, que el día D la hora H no estaba, y en el deporte de alta competición si no estas te adelantan por todos lados. Una lastima, pero bueno, todavía le quedan años de vida deportiva, seguro que aún le queda mucho por dar.

Y eso ha sido todo por hoy. Nos espera la esperada final entre Alcaraz y Djokovic, pero sin olvidarnos de la lucha por el bronce de nuestra pareja Bucsa/Sorribes y de que en golf puede que Jon Rahm nos de algo. El domingo va a ser un gran día.

Y llegó el oro

Me ha sido imposible seguir la vela en estos Juegos. El exceso de pruebas de nuestros deportistas y los complicados horarios de las pruebas al aire libre ha hecho casi imposible seguirlas. Nuestra vela siempre ha sido caladero de medallas por lo que hubiera merecido algún tipo de seguimiento… pero totalmente imposible. En el día de ayer, una vez sabiendo que estábamos en una Medal Race, por fin le dediqué mi atención a la prueba del 49er, con nuestros regatistas Diego Botín y Florian Tritte. Efectivamente, hice lo que todo español de pura cepa hace siempre, seguir solo a los deportistas que triunfan.


La carrera por la medalla de ayer iba estupendamente bien, estábamos rozando todo el rato la primera posición y solo necesitábamos entrar entre los 3 primeros para ganar el oro. A mitad de prueba, empezaron a sacar una serie de banderas y la carrera quedó suspendida por falta de viento. Vamos, que la prueba no había servido para nada.Al día siguiente hubo repetición y la misma tónica, nuestros regatistas en primera posición todo el rato hasta la línea de meta. Curiosamente no habían ganado ninguna de las diez pruebas que forman parte de la competición y tampoco necesitaban ganar esta para hacerse con el oro, ya que lo que prima aquí es la regularidad. Pero mira por donde, se dieron el gusto de ganar la medalla de oro como campeones entrando en primera posición. Así que una vez más la vela nos da el metal más precioso de los que existen. Enhorabuena a nuestros regatistas por el mejor de los resultados posibles.

La siguiente medalla del día que ya es segura, porque aún no sabemos si será oro o plata, fue la de Carlos Alcaraz, que se enfrentaba a un canadiense que llegaba agotado por su infernal calendario de partidos. Antes de jugar con Alcaraz había disputado la medalla de bronce del dobles mixto y el resultado ha sido directa consecuencia de eso: 6-1, 6-1 y Carlitos ni se ha despeinado. Así que el domingo juega la final contra Djokovic, que ahora mismo es el mejor partido que se puede ver en una pista de tenis y encima con el mayor premio posible en juego, la medalla de oro. Plena confianza en que llegará a lo más alto del podio, esto no se le puede escapar.
En el dobles femenino no pudo ser y Cristina Bucsa y Sara Sorribes no pudieron hacer nada ante sus rivales neutrales, que jugaron todo el partido a un ritmo bastante superior a las nuestras. En fin, hoy no era el día, pero seguimos teniendo el partido por la medalla de bronce, así que crucemos los dedos.

Otra medalla más en boxeo, sin saber el color aún ya que aquí dan dos bronces a los que pierden en semifinales. En esta ocasión, el marbellí Ayoub Ghadfa, una mole de 1,95 con una agilidad sorprendente para estar en la categoría de +92 kilos. Un combate muy serio contra un armenio, llevando todo el rato la iniciativa y asestando unos golpes contundentes que han hecho que se decida el combate por decisión unánime de todos los jueces. Estamos que nos salimos en boxeo, casi todos nuestros representantes están logrando mínimo el diploma, es espectacular.

Vamos con el repaso diario de deportes de equipo. En hockey hierba masculino hemos perdido con Holanda después de ir 2-0 por delante. Aunque hemos pasado a cuartos, lo hacemos en la peor posición posible y nuestro rival será Bélgica, que es el actual campeón olímpico, así que pintan bastos.
En baloncesto muy bien… en 3×3, donde hemos ganado a Australia y a Canadá y una victoria contra nuestro siguiente rival Alemania nos metería prácticamente en semis. A ver como quedamos en este deporte que es una incógnita total absoluta.
En el otro baloncesto, en el de 5×5 masculino… pues desastre absoluto. Teníamos que ganar a Canadá y luego hacer montón de cuentas con los puntos para ver cual era nuestro cruce Por desgracia nos hundimos en el segundo cuarto donde nos hicieron un 30-19. Aunque ganamos los dos cuartos siguientes no sirvió para nada por lo que nos vamos directamente a casa. La sensación de fin de ciclo y de punto final es enorme. Han sido unos años maravillosos con esta selección, pero los jugadores que nos dieron tanta gloria ya no están, así que solo queda reinventarnos para el futuro. Y adiós a Rudy, uno de los más grandes jugadores que ha tenido la selección. Otra leyenda que se nos va.

Voley playa, nuestra pareja masculina Pablo Herrera y Adrian Collado han logrado hacerse con la victoria en el tercer partido de la fase de grupos y han pasado directamente a octavos… hostia, octavos, todavía queda la vida aquí. Bueno, paso a paso.
En balonmano masculino derrota ante Alemania, que nos hace jugárselo todo en la última jornada contra Croacia. Aunque es una fase de grupos, es una auténtica final ya que unas cuantas combinaciones nos dejan fuera, así que a ganar porque sino podemos irnos a casa también como ha pasado con el equipo femenino.

Mucho desastre ahora que veo todo junto… pero en fútbol nos hemos resarcido haciendo un partidazo ante Japón con un Fermín espectacular. Victoria incontestable por 3-0 y pase a semifinales donde nos enfrentamos a Marruecos que ha vapuleado a los Estados Unidos. Ha llegado la hora de vengar la derrota en el último Mundial para hacernos con el pase a la final.

Y esto ya es todo en el deporte de equipos… bueno, hubo tiro con arco mixto pero nos quedamos a un paso de las medallas al ser eliminados por la India… lastima.

En cuanto al resto del día lo más reseñable es que ya ha empezado el atletismo dentro del estadio y nuestra Ana Peleteiro que aspira a todo, se ha clasificado para la final en su primer salto, así que mañana a la final con todo que se merece llegar hasta lo más alto.

A partir de hoy ya podemos hacer recuento diario de medallas que ya no da vergüencita: 1 oro, 1 plata, 3 bronces, 3 desconocidas. 5+3. Buen botín a esta altura de los Juegos.